Urano en Tauro: bitcoins y veganos

Protesta vegana en algún país sajón


En 2018 Urano ingresó a Tauro, luego volvió brevemente por unos meses a Aries al ponerse retrógrado, reingresando a Tauro en 2019, signo en el que se va a quedar hasta 2025. Luego va a ingresar a Géminis, va a volver a Tauro por unos últimos meses y va a quedarse definitivamente en Géminis en 2026. 

Tal como lo describí en el posteo acerca de Donald Trump, Urano sinifica evolución, cambio, progreso. Para cambiar hace falta romper ciertas estructuras establecidas (que corresponden a Saturno), por lo que la energía uraniana siempre está en conflicto con lo saturnino, lo establecido. Urano tarda 7 años en transitar cada signo, y durante esos años "revoluciona" la energía de ese signo obligándonos a evolucionar en esas áreas. 

Por ejemplo: Urano en Libra, a fines de los '60 y principio de los '70 nos obligó a evolucionar en todo lo libriano, principalmente en el concepto de matrimonio, que parecía ser un concepto indiscutible que constituía una de las bases de la sociedad. Si dos personas querían vivir juntas tenían que casarse y el matrimonio era para toda la vida, nada de ideas raras. Pero con Urano en Libra empezaron a aparecer ideas y conductas radicales: los jóvenes (hippies) empezaron a juntarse y a convivir sin casarse (inclusive sin practicar la monogamia), para horror de sus padres y vecinos conservadores. Divorciarse pasó de ser una tragedia que se llevaba con vergüenza a una opción válida que cada vez más parejas practicaban. De hecho el Urano el Libra propició que en todo el mundo las leyes de matrimonio y las condiciones para el divorcio se hicieran más laxas y accesibles. (Recordemos que en la Argentina, si bien existía el divorcio, estaba prohibido casarse de nuevo, eso se aprobó recién en 1987 con la feroz oposición de la Iglesia y las facciones más conservadoras de la sociedad. Fue uno de los últimos países en legislarlo).  

Pero vamos al Urano en Tauro. Sabemos que Urano va a revolucionar la energía taurina, pero, ¿qué representa exactamente el signo de Tauro? Si nos fijamos en las palabras asociadas a Tauro vamos a leer cosas como: finanzas, ingesos, posesiones materiales, el mundo material, confort, valores personales, y a veces autoestima. ¿De dónde vienen estos conceptos? 

Una forma de explicarlo es así: el zodíaco representa la vida de un ser humano, y los signos son etapas en la evolución de ese ser humano. Aries es el recién nacido, lo nuevo que llega al mundo, el nuevo ser individual, un nuevo "yo". Pero para que ese ser humano tan frágil sobreviva en este mundo duro y frío necesita cierto confort material. Necesita que lo abriguen, que le den de comer, que lo pongan a salvo, que lo mantengan caliente. Tauro provee ese marco material que todos necesitamos para sobrevivir, que en nuestra sociedad, la mayoría de las veces, se asocia simplemente con el dinero.

Pero otra forma de explicar otro aspecto de Tauro es la siguiente: Tauro está regido por Venus, el planeta de lo sensual, y Venus, en esencia, nos señala aquello que es importante para nosotros, ya sea una persona de la que nos enamoramos, o una actividad que nos cause placer, o lo que sea. Cuando encontramos algo que es importante lo queremos atesorar, ahí es donde está nuestra riqueza o nuestro tesoro. De ahí la cuestión de los "valores" de Tauro. No se refiere tanto a los valores morales (algo más sagitariano o inclusive capricorniano) sino a aquello que yo considero valioso. Y a aquello que consideramos valioso la humanidad le asignó un valor en dinero y el dinero, en esencia, representa la posibilidad de acceder a cosas que nos parecen valiosas. Por eso Tauro rige el dinero y por eso Venus, increíblemente, también está conectado con las finanzas y lo material, cuando todo el mundo tiende a pensar que rige el amor romántico y la expresión artística. 

Y ya que mencionamos la conexión de Tauro con el dinero... El centro financiero del planeta es Wall Street. ¿Y qué hay en Wall Street, además de gente que maneja millones y millones de dólares por día? La estatua de un toro. (Al que, ejem, hay que tocarle los testículos para que dé buena suerte y abundancia). 

El toro de Wall Street

Pero hay un tercer elemento en la definición de Tauro que es un poco avanzado pero no por eso menos cierto, y es el siguiente: tiene que ver con el proceso por el cual la energía se transforma en materia, lo cual tiene sentido porque Tauro rige lo material. 

Conocemos el proceso por el cual la materia se transforma en energía, el famoso e=mc2 de Einstein. Esa ecuación, que es la base de la bomba atómica, pertenece a lo plutoniano, por lo tanto a Escorpio, signo opuesto a Tauro. Pero no conocemos (que yo sepa) una ecuación que explique el proceso opuesto, cómo la energía se transforma en materia. 

O sea: imaginemos que plantamos la semilla de un árbol, la regamos y la dejamos al sol. Unos años después esa semilla se transforma en un árbol que pesa 500 kilos de madera y hojas. ¿Cómo se transformó la energía del sol en 500 kilos de madera? La energía del sol es luz, no es "material" al menos para nuestros sentidos. Eso proceso tiene que ver con Tauro, con la creación de lo material a partir de incorporar lo no material, y ese proceso tiene mucho que ver con algo que se asocia a Tauro pero es menos conocido: la alimentación. En el sentido en que alimentarnos es incorporar algo externo que termina integrándose a nuestro cuerpo y haciéndose materia. 

Para ir terminando: Urano en Tauro va a revolucionar las finanzas, el mundo material, los bancos, el sistema financiaro y la forma en la que nos alimentamos. 

Los astrólogos no se ponen de acuerdo aún en qué forma Urano va a afectar estas cosas. Algunos hablan de que vamos a ir a un mundo de criptomonedas como el bitcoin, sin regulación por parte de los bancos centrales que responden a los Estados. Otros dicen que va a desaparecer el dinero físico y vamos a ir a un mundo de dinero virtual. Ambas ideas parecen bastante uranianas. 

Pero algo es indudable y no todo el mundo lo está asociando con Tauro: se está produciendo una revolución en la alimentación y millones de personas están haciéndose veganas o vegetarianas o crudívoras y están dejando de lado las pautas establecidas de cómo había que comer o qué alimentos eran buenos. Esto es evidente por donde se lo mire. En cualquier supermercado se consiguen productos no animales como la leche de almendras que antes eran muy raros, hay protestas veganas por todos lados (o las había antes de la pandemia), etc. etc. 

(De hecho, en medio de una crisis económica extrema, las pequeñas companías que se dedican a vender productos veganos o saludables están creciendo, algo que suele ocurrir cuando uno hace negocios protegido por las tendencias uranianas). 

Hace poco el Congreso Nacional argentino aprobó la ley de etiquetado de alimentos, que obliga a las compañías a señalar en forma clara que los alimentos tienen ingredientes poco saludables como azúcar o grasas trans. Eso es parte de un proceso colectivo: estamos tomando conciencia de que ciertas cosas no son saludables y revirtiendo mentiras que duraron siglos. Toda la vida escuchamos que la leche de vaca era buena porque tenía calcio, o que la carne era buena porque tenía proteínas. Estas aformaciones cada vez son más desafiadas. Hay productos vegetales que tienen más calcio que la leche de vaca, que muchos empiezan a considerar un veneno, y hay granos y verduras que tienen más proteínas que la carne animal sin el colesterol o la necesidad de matar cruelmente a un animal inocente. 

Hasta la misma epidemia de coronavirus obliga a la humanidad a tomar conciencia de esto. Las últimas pandemias tuvieron que ver con contagios que vinieron de los cerdos, de las aves y ahora de los murciélagos. ¿Por qué seguimos comiendo animales si pueden matarnos?

Piensen en sus conocidos de las redes sociales, ¿cuántos empezaron a postear cosas acerca de la alimentación y el veganismo desde 2018? De pronto el tema se popularizó y más y más gente comenzó a prestarte atención a esto.

Apenas pasaron dos años del Urano en Tauro y a Urano le falta recorrer un buen trecho hasta completar el signo. No querría hacer previsiones porque no sé mucho del sistema financiero y no sé exactamente qué va a pasar, pero seguramente para 2026 haya habido algunos cambios importantes en la forma en la que usamos el dinero y seguramente mucha gente estará comiendo más sano. Veremos qué pasa.

 

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